La «homoplutia» es el fenómeno que se da en las economías capitalistas muy antiguas como USA, comienzan a aparecer trabajadores a salariados, personas que son contratadas por otras personas a cambio de un sueldo regular en unas horas de trabajo regulares como todos los demás trabajadores pero con la particularidad de que ganan lo mismo o mas dinero que los empresarios dueños de compañías, fabricas, acciones y demás personas que poseen la propiedad legal y factica de los medios productivos. Trabajadores que son mas ricos que los ricos que los contratan.
Si se toma el 10% de los trabajadores que mas ganan en USA y también tomamos el 10% de los mas ricos del pías nos damos cuenta que son las mismas personas. Y este numero era un 50% menos hace 10 años, con lo cual el porcentaje de trabajadores en la cúspide de la riqueza esta creciendo, desechando la teoría de la explotación marxista y la teoría de las clases también.
Esto solo lo consigue explicar la economía austriaca: La economía es un intercambio de servicios y solo de servicios, los productos sirven para satisfacer necesidades no tienen valor en si mismos, las personas no quieren un auto, quieren poder llegar a su empleo en la mañana, si pudieran trabajar desde casa, o el bus les pareciera mas fácil, o el uber, no querría un auto para hacer eso, todo elemento matete rial puede ser potencialmente intercambiado por algo que haga mejor su función, la función es puramente subjetiva en la mente del que quiere el servicio.
Tu intercambias el servicios que puedes dar, por el uso potencial del servicios de todos los demás, eso es el dinero, se se encuentra una forma de que cada uno pueda satisfacer a mas personas y que haya mas personas capacitadas para satisfacerte a ti en la misma cantidad de tiempo la riqueza disponible para cada uno, es decir, las cosas que podemos pedirle a los otros que hagan por nosotros aumenta haciéndonos a todos mas ricos, si una maquina puede hacer que mas personas viajen mas rápido y mas barato con menos tiempo los viajes serán mas para todos, igual las casas, los autos, el alimento, el internet, lo normal es que esto se vea reflejado en la baja de los precios de todas las cosas, pero los gobiernos se financian con inflación con lo cual se ve reflejado con el aumento de los salarios y la única limitación es lo que las maquinas puedan hacer por nosotros.
Cerca de mi casa hay un bosque de hadas. Comenzó en el invierno de 2020 y ha ido creciendo gradualmente hasta la primavera de 2021. A primera vista, este proyecto popular puede parecer un fenómeno extraño, pero su existencia muestra no solo un anhelo, sino el inevitable regreso del reencanto asi como la solidez de la modernidad se desvanece. Nos cansamos de los límites de nuestra creación, conectados con la necesidad y el deseo de estar en un espacio compartido y trascendente más allá de nuestra capacidad de predeterminar o fabricar. La existencia y el crecimiento de este bosque de hadas, de estos altares, habla de este reencantamiento y de la inevitabilidad del culto. 1
Es una falacia que el mundo material pueda satisfacer nuestros más profundos anhelos. Como todos los barcos parecen levantarse a nivel mundial, las tasas de felicidad general en los países a los que otros aspiran a ser están cayendo. 2 Hay algo que falta en nuestras formas de encontrar sentido y pertenencia a la vida. La sorprendente popularidad de las conferencias bíblicas de Jordan Peterson en la época más secular de la historia de Occidente no es más que un ejemplo evidente de que somos una cultura espiritualmente hambrienta. 3 Aquí está la prueba de que el hecho de que la gente moderna carezca de una explicación racional de su anhelo por un mundo encantado, un mundo imbuido de significado, no significa que no esté allí.
A pesar de la precisión de la ciencia moderna, quedan aspectos de nosotros mismos que se comprenden poco o que solo se pueden insinuar de forma indirecta. La ciencia puede describir la materia, pero no puede describir lo que importa. 4 El estudio poco entendido de la conciencia habla de los límites de la reducción de la vida a métricas científicas. Y también podríamos mencionar nuestra escasa comprensión de la relación entre significado y motivación en la vida de las personas. 5 Pero en nuestros esfuerzos por comprendernos mejor a nosotros mismos y controlar el mundo que nos rodea, tenía sentido reducir todo a «la ley del instrumento». 6 Exprimir la variable alma de la ecuación del ser.
Fue una apuesta justa, ya que perfeccionar los poderes del mundo material produjo resultados científicos y tecnológicos increíblemente poderosos. Por un tiempo, parecía que podíamos encantar al mundo, que “podíamos ser como Dios pero sin Dios”. 7 De hecho, el pronunciamiento de la muerte de Dios por parte de Nietzsche fue una prueba cercana de su éxito. 8 Del mismo modo, la prevalencia de esta “cultura de la autoinvención”, para tomar prestado el término del obispo Barron, indica una casi victoria similar de la “existencia que precede a la esencia” de Sartre: que nosotros, y nuestro significado que se encuentra en la vida, somos auto-creados. 9
Nuestra esencia, sin embargo, nos sigue devolviendo a la realidad, destacando la insuficiencia de una existencia material para satisfacer las necesidades espirituales fundamentales; y las personas hambrientas de significado encontrarán alternativas donde puedan, distraídas por el pronunciamiento de la pista falsa de Nietzsche. Donde una vez que conocimos nuestra máxima preocupación como la fe y la devoción a Dios, su supuesta muerte rompió esta jerarquía de valores ya hecha, dejándonos no tan capaces de crear los nuestros como sugiere Nietzsche que debemos hacer, sino más bien vagando sin rumbo, despojados de dirección y propósito. 10 En consecuencia, convencidos de la muerte de Dios, le dimos la espalda y comenzamos a buscar nuestra “máxima preocupación” en otra parte; de cabeza a esa oscuridad exterior, al margen de la creación, en busca de algo más fácil de adorar.
Cuanto más nos alejamos del misterio y de las desafiantes demandas de la adoración de Dios, más nos aferramos al significado de lo inmediato. La riqueza, el poder, el placer y el honor son todos frutos de las pasiones. 11 La libertad del hedonismo nunca se sintió tan bien. Pero la profundidad del esfuerzo requerido indica un retorno de la inversión igual. Buscando aún el encanto, encontramos consuelo donde podemos, haciendo ídolos de hadas. Del mismo modo, piense en los miles de millones gastados para crear películas de superhéroes y considere la popularidad del cosplay en las convenciones, ambos son características de las profundidades en las que la gente anhela participar en una historia significativa. Una señal segura de que estamos en los límites de este mundo de nuestro propio diseño. Hemos llegado al fondo espiritual y no tenemos a dónde ir.
Habiendo crucificado a Dios, la sociedad moderna clama desde lo más profundo por algo más allá de sí misma. Habiendo perdido su camino, busca más de lo que puede ver, algo que trascienda los límites del materialismo. Al estar en general bien alimentados, vestidos, protegidos, rodeados de tecnología que era solo una quimera hace 20 o 30 años, las personas siguen insatisfechas con sus vidas. Vivimos la realidad de la predicción de Dostoievski de que incluso si lo tuviéramos todo, seguiríamos insatisfechos con una utopía material. 12 El reciente interés renovado en el uso de drogas psicodélicas deja en claro el deseo de las personas de trascender la realidad material, aunque sea sólo temporalmente, aunque sólo sea por medios materiales. 13 O considere la realidad virtual como una encarnación más de este estertor de la muerte. Otro esfuerzo fallido para encantar el mundo material, para proporcionar un espacio tridimensional para que nuestras almas vivan, más allá de nuestras vidas materiales vividas entre portaobjetos de microscopio.
Si bien una reducción del mundo a elementos materiales genera descubrimientos increíblemente poderosos y útiles, no proporciona una historia en la que pueda vivir. No proporciona un enfoque ni ningún punto que conduzca a nada más que al nihilismo. La existencia no puede definir la esencia. El primero no puede existir sin el segundo, ya que solo puede revelarse a través de la existencia a lo largo del tiempo. Esta orientación no solo admite encanto y propósito, sino una historia unificadora que se puede compartir. Navegar por este espacio no es para elegir la realidad material o la metafísica, ya que necesitamos tanto el cuerpo como el alma, lo material y lo espiritual, para estar plenamente vivos. La esencia necesita un cuerpo tanto como nuestros cuerpos necesitan una esencia.
Otra forma de entender esto es que estamos hechos tanto de material como de potencial. No buscamos una existencia estática, sino más bien convertirnos en más de lo que somos. Entonces, esta unión no es solo un medio para reparar nuestra realidad material, sino también un camino para redimirnos a nosotros mismos: nuestra Caída y nuestras almas. Admitir un espacio más allá de la realidad material permite la posibilidad de misterio y encanto, de crecimiento en un mundo en constante cambio y expansión. Además, admitir el mayor de estos espacios, uno gobernado por Dios, ofrece un potencial y un espacio ilimitados para crecer. Esta visión es pragmática en su capacidad de desarrollarse más allá de lo que eres. Es el fin de los medios.
Porque al final, sabemos que este mundo de hadas no es una historia en la que podamos vivir. Es solo un pastiche, un vano intento de unir fragmentos dispares en un todo cohesivo. No es acorde con nuestro anhelo. No puede contenernos. Son tiras de belleza para enmascarar la tierra con cicatrices más allá de la vista desde la ventana del automóvil. En el mejor de los casos, una papilla fina y espiritual que alimentará las almas de la misma manera.
No nos veamos cortos en nuestra adoración, tratando de moldearla para nosotros, sino miremos más alto y dejémonos moldear por ella. 14 Fije nuestra mirada en el Altísimo y deje a esos dioses menores en sus lugares apropiados, buscando en cambio el bien supremo, hermoso y verdadero que nos lleve más allá de los límites materiales de nuestro propio diseño, y el nihilismo que viene con él. Con Dios, la esencia nuevamente precede a la existencia. Entonces, con un guiño a San Pablo, dejemos de lado las cosas infantiles, una visión ingenua de Nuestro Señor y una negación de nuestras necesidades espirituales, vistiéndonos en cambio con una visión más completa. Que busquemos imitar a Cristo en la plenitud de su gloria y nutrir nuestros espíritus hambrientos de Dios, la esencia de nuestra existencia corporal.
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Tupy, Marian L. “The Most Important Graph in the World”, Human Progress, diciembre de 2016. Elliot, Josh K. “Canadá cae del top 10 en World Happiness Report”, Global News, marzo de 2021.
Por ejemplo, su Serie Bíblica I: Introducción a la Idea de Dios tiene más de 8.5 millones de visitas. Sin nombre. “En Estados Unidos, el declive del cristianismo continúa a un ritmo rápido”, Pew Research Center, octubre de 2019
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Vea a Joe Rogan, el podcaster más popular del mundo, y su defensa de los beneficios de su uso. Sandwich, Realidad. «Joe Rogan: Dedemonizing Psychedelics», Benzinga, marzo de 2021.
De Young, el P. Stephen. “Apocalypse Now and Then”, a las -25: 20. El Señor de los Espíritus, julio de 2021.
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